Una parte vital de comenzar un nuevo negocio es darse a conocer, y obviamente una buena alternativa para lograrlo son las redes sociales. No obstante, existe una serie de riesgos que pueden amenazar tu emprendimiento si no usas estas herramientas correctamente. ¿Los conoces?
De acuerdo a la compañía de seguridad en línea ESET, existen algunas medidas básicas de protección ante las distintas amenazas que se encuentran en internet. Revisa a continuación una lista con 5 de estos consejos, pensados especialmente para que puedas promocionar tu marca, sin perderlo todo en el proceso.
- Software al día, dispositivos seguros: este tip puede sonar como algo obvio, pero es sin duda el primer paso para tener redes sociales seguras. ¿Cómo lograrlo? Actualiza todo el software de tus computadores y equipos móviles, especialmente os navegadores. Así mantendrás a los cibercriminales lejos de tu marca.
- Contraseñas fuertes sobre todo: ¿tienes alguna clave que tenga tu fecha de nacimiento o simplemente sea cinco veces el mismo número? Entonces, es probable que tus redes sociales puedan ser hackeadas. Para evitarlo debes contar con un código fuerte. Es decir, que sea único para cada servicio y que incluya mayúsculas, minúsculas, números y caracteres especiales.
- Configuración, un posible problema: muchas redes sociales cuentan con sus propias opciones de seguridad y privacidad. Es por esto, que es necesario que aprendas a configurarlas correctamente, para compartir sólo lo realmente necesario. ¿Por qué? Un exceso de datos podría llevar a los hackers a extraer tus datos privados, y así adivinar las contraseñas de tu marca y robar su identidad en línea.
- Ser escéptico puede jugar a tu favor: una regla que generalmente se aplica a todo el contenido de internet es: “si algo suena demasiado bueno para ser cierto, probablemente lo sea”. Teniendo esto en mente, evita entregar tu información sensible o la de tu marca, ante clientes u ofertas que puedan sonar sospechosas.
- Evitar a los “extraños”: este consejo tiene especial relación con el punto anterior, pero está enfocado en los usuarios. De esta manera, debes tener cuidado con aquellos clientes anónimos o camuflados que se acerquen a tu emprendimiento y pidan un exceso de datos. Si no tienes cuidado, los cibercriminales pueden secuestrar tus datos y obligarte a realizar acciones que normalmente no aceptarías. Es decir, la peor pesadilla de cualquier negocio.
