“El anti-review” de los Sony SRS-NS7 #AbreTuCaja2022

Aunque no son únicos, la apuesta de Sony con estos audífonos abiertos apela a un público que ama sentirse distinto y poseer dispositivos de vanguardia, independiente del limitado uso que tenga.

*Esta entrega de Entreprenerd narra las vicisitudes de un periodista que, por tener el don de explicar bien la cosa tecnológica, se ve obligado a hacer reviews de diversos dispositivos y productos tech de consumo que, en honor a la verdad, no siente propios.


 – ¿Pero no me sirven para salir a la calle, no? – dice Karen, limitando de entrada la funcionalidad detrás de esa bufanda tecnológica que engalana mi cuello. 

Incluso la tela se asemeja a las chalinas inglesas de antaño. No así Sony, super japonés.

“Servirían si viviéramos en un país con bajos índices de criminalidad, Karen” quise responderle, aunque la idea de abrir ese debate se contrapuso de inmediato a mi obligatoria productividad diaria.

Pero tiene un punto Karen a la hora de opinar sobre los Sony SRS-NS7, este maravilloso dispositivo de audio que mezcla el mejor sonido del fabricante japonés con un diseño casi espacial, ergonómico y flexible, que le permite posarse con comodidad y sin problemas en el cuello de cualquier usuario: no sirven para exterior si la idea es ir a pasearse por ahí rodeado de gente que quizás no tiene ganas de escuchar Venom, Mon Laferte o “No se habla de Bruno” -dependiendo del ánimo- mientras hacen trámites en la ruidosa Gran Avenida.

Sí podría servir para hacer ejercicio suave en un lugar abierto, por ejemplo. Como poseen protección IPX4 -resistente a gotas y salpicaduras mayores de agua-, son una buena opción sobre todo por seguridad: al no estar introducidos en el oído, este tipo de audífonos, similares a los de vibración pero algo más pesados, sirven para escuchar música sin dejar de lado el audio ambiente.

La entrada USB-C viene con protección. El equipo trae un mini cable de carga -pensado en el PC- y un dock y cable óptico para conectar a un televisor Bravia.

¿Los usaría para eso? No, porque no hago ejercicios. Lo que si hago es cocinar, trabajar en casa, hacer aseo y en general funciono productivamente en un espacio cerrado. Para eso este equipo es ideal. 

La clave tiene que ver con dos cosas: primero, con su capacidad cómo dispositivo de manos libres: con solo apretar un botón puedo contestar llamadas, subir y bajar volumen, apagar, prender y conectar a un dispositivo. 

“Pero un audífono normal hace lo mismo”, diría cínicamente Karen, ante lo cual le respondería que, a diferencia del audífono normal, es un Sony -lo que asegura sonar filete- y es más grande por lo que acceder a estos botones es harto más fácil que esos detalles de diseño funcionales de los ínfimos audifonos estilo Pod, que al final entre ir por el celular y pillar el botón, terminas sacándote el poroto de la oreja.

Botones grandes y claros, nada de menudencias ni sensibles sensores digitales.

Lo otro tiene que ver con el poder escuchar música suavemente y mantenerse conectado al mundo. Acá entra el que suene la puerta, una alarma en el edificio o una posible situación de emergencia “algo que no podrías hacer con tus audífonos comunes, Karen” pensé, ya algo obsesionado con el inexistente debate. 

Eso sí, el diferencial de este dispositivo –disponible en la Sony Store por cerca de 189 mil pesos – tiene que ver con un diseño llamativo y cómodo, y con una funcionalidad exclusiva si tienes un televisor Sony Bravia: al conectarse la experiencia auditiva sube varios puntos pues se forma un ambiente sonoro mezclando los parlantes del televisor con los de este dispositivo. 

¿Algo más? No hacen pedazos las orejas, a diferencia de los populares modelos intrauriculares que, con o sin goma, cansan. Lo mismo ocurre con los que van por fuera, tapando la paila entera y acumulando incomodidad con el paso de las horas. 

El diseño se acomoda bastante bien. Y esos parlantes, suerte de subwoofer corporal, hacen una enorme diferencia.

Y se ven bien. Bastante bien, debo decir. Ese, creo, es el motivo que genera la cínica acidez de Karen a la hora de verme rockear este cuello tech de alta fidelidad y emitir sus opiniones.

¿Y cuánto te costó esa gracia? – pregunta, ajena a mi realidad como periodista de tecnología. 

Son prestados para hacer un review- le contesto.

¿Y más encima tienes que devolverlos? La media gracia -dice con mordaz acierto y un poco de pica, mientras enfila a la calle con sus audífonos chinos comprados en la feria.

Ojalá no escuches música tan fuerte para que no te atropellen” le grito en mi imaginación mientras guardo los Sony en su caja y sueño con el día en que pueda comprarlos para cocinar, trabajar e ir a baño escuchando a la Familia Madrigal en pleno, por decimosegunda vez consecutiva.

Modelo referencial. Mi casa no luce así.

Especificaciones técnicas

  • 12 horas aprox de reproducción
  • Carga rápida de 10 minutos – 1 hora de reproducción
  • USB Type-C®
  • 20-20 000 Hz (muestreo de 44,1 kHz)
  • 360 Spatial Sound Personalizer con sonido Surround Dolby Atmos® 
  • X-Balanced Speaker Unit envolvente 
  • Diseño flexible, ergonómico y ajustable para todo el día
  • Diseño a prueba de salpicaduras IPX4
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