En los últimos años, Coyhaique ha sido reconocida como una de las ciudades con la peor calidad del aire en Latinoamérica, principalmente debido a las altas emisiones de material particulado por calefacción de leña.
Esto, que es un problema para quienes habitan la comuna, fue visto como una oportunidad para un grupo de profesionales, quienes con el aporte de Corfo a través de la línea de Innova Región, están apoyando el proyecto HeatBox Calefacción.
Tobías Hellwig Wendler, de TMS Energía, empresa a cargo del proyecto, explicó que su objetivo es desarrollar un servicio innovador de venta de energía térmica limpia y eficiente en la región de Aysén.
“No venderemos equipos, sino que ofreceremos un servicio de venta de calor que suministra a un sistema de calefacción ya construido. Esto nos permite llegar a aquellos clientes que quieran o necesiten cambiar su sistema de calefacción y prefieran un sistema amigable con el medio ambiente que utiliza medios de calefacción modernos, limpios y sustentables como son la energía Aerotérmica y el Pellet”.
HeatBox busca desarrollar un módulo de generación de energía térmica para calefacción central, que mediante un sistema de control inteligente optimiza, en tiempo real, la eficiencia de la generación de calor en base a dos fuentes de calefacción complementarias: Energía Aerotérmica y Biomasa.
Al utilizar dos fuentes de calor complementarias, HeatBox posee la capacidad de operar con cada uno de los equipos de forma independiente, dando al sistema una seguridad adicional en caso de falla.
“La energía aerotérmica se basa en el uso de una bomba de calor para extraer el calor del aire ambiental. Lamentablemente estos equipos se vuelven menos eficientes cuando la temperatura exterior cae significativamente, situación frecuente en la región. La idea es que, en esos momentos, nuestro sistema inteligente operará la caldera de pellet para suministrar el calor requerido. Esta característica le otorga una ventaja importante para clientes que requieren una alta fiabilidad del sistema de calefacción, como son centros de salud y establecimientos educacionales, que por sus características no pueden operar en caso de falla del sistema de climatización”, precisó Hellwing.
Agregó que “gracias al aporte de Corfo nos encontramos en proceso de escalar nuestra solución a un prototipo comercial que estará en funcionamiento durante varios meses y que monitorearemos en profundidad para confirmar los atributos de nuestro servicio, pudiendo ofrecerlo al mercado con la confianza y seguridad de un caso real de éxito”, concluyó.
Por su parte, Omar Muñoz Sierra, director de Corfo Aysén, detalló el objetivo de apoyar este proyecto.
“La innovación es uno de los ejes centrales del quehacer de la Corfo. Hoy más que nunca necesitamos que las empresas, pequeñas, medianas y grandes, puedan impulsar iniciativas que sean rentables y que al mismo tiempo impacten positivamente en la comunidad y su entorno. En el caso de HeatBox estamos frente a una idea que apunta a resolver unos de los problemas centrales para nuestra región, como es el de la contaminación. Como Corfo estamos convencidos de que debemos apoyar ideas de negocio como estas, donde la innovación busca desarrollar iniciativas que tienen como objetivo mejorar la calidad de vida de las personas, en este caso, mejorando la eficiencia energética en el proceso de calefacción”.
HeatBox es una iniciativa pensada para que aquellas instituciones públicas o privadas que debido a restricciones normativas, dificultades de abordar la operación del sistema de calefacción, altos costos de operación y/o requerimientos de reemplazar los medios de calefacción, estén interesados en tercerizar estos servicios y preferir un sistema de calefacción sustentable y limpio distinto a los convencionales, disminuyendo las emisiones de material particulado pero también la de gases que contribuyen al calentamiento global.
