“Todos los niños, niñas y jóvenes de Chile debieran aprender a programar independientemente de la carrera que estudien, ya que estas nuevas habilidades les servirán en el futuro”, con estas palabras, Paulina Rodríguez, gerente de Ciudadanía Corporativa y RSE de Samsung responde a la interrogante sobre si es necesario que los colegios deban comenzar a implantar las clases de programación como una materia tal como lo es Matemáticas o Lenguaje.
Esto, en relación a la iniciativa mundial del gigante coreano con respecto al programa internacional Samsung Innovation Campus (SIC) que capacita a jóvenes en tecnologías del futuro junto a la ONG Innovacien.
En esta versión 2021 participan más de 150 estudiantes de enseñanza media de Santiago, Temuco y Viña, quienes a través del curso de programación aprenderán: Fundamentos de la programación con Scratch, lenguajes Python y C, Arduino; y resolución de problemas con algoritmos.
“En ese contexto, para nosotros es súper importante que en las escuelas se realicen este tipo de programas educativos para que los niños, niñas y jóvenes de Chile puedan aprender a programar y también a aprender sobre las nuevas tecnologías”, indicó Rodríguez a Entreprenerd.cl
Agregó que “Hoy más que nunca (contexto crisis sanitaria) hemos visto cómo la tecnología se ha convertido en una herramienta fundamental en nuestras vidas, por lo que cada día será más importante contar con este tipo de conocimientos para poder desenvolverse. Por eso, es muy importante que los niños desde chicos se puedan familiarizar con este tipo de contenidos para que puedan aprender a crear, a entender que hay detrás de un click, a automatizar tareas y a resolver problemas gracias a la tecnología”.
Con respecto a la iniciativa, esta cuenta con 6 Módulos diferentes y 150 horas de capacitación. Además, se realizarán algunos concursos dentro del programa, y en la última etapa del curso cada estudiante recibirá un kit tecnológico para que ellos mismos puedan experimentar con Arduino.
Rodríguez explica que “Todos los niños, niñas y jóvenes de Chile debieran aprender a programar independientemente de la carrera que estudien, ya que estas nuevas habilidades les servirán en el futuro. Gracias a la programación, ellos aprenderán a pensar distinto. La programación, además, fomenta la creatividad y permite usar el ingenio para resolver problemas. Es sumamente enriquecedor para las futuras generaciones”.
INTELIGENCIA ARTIFICIAL PARA EL 2022
Con respecto a los planes para el 2022, la gerente de Ciudadanía Corporativa y RSE de Samsung indicó que “esperamos no solo tener un curso de “Programación y Código” sino que ofrecer un nivel más avanzado para los estudiantes, que aún no está confirmado, pero podría ser un curso de Internet de las Cosas o de Inteligencia Artificial”.
“En los planes está ir creciendo en cantidad de estudiantes, cantidad de liceos beneficiados y ofrecer más cursos con distintos niveles. Además, nos interesa muchísimo llegar a más perfiles femeninos”, enfatizó.
“La meta general de esta iniciativa es que los jóvenes se “empoderen” gracias a la tecnología y que se atrevan a crear. Que no solamente sean usuarios de tecnología, sino que se conviertan en creadores de ésta y que desarrollen al máximo su creatividad. Con esto esperamos que ellos puedan tener más oportunidades en su futuro”, puntualizó la ejecutiva.
LOS JÓVENES Y LA INDUSTRIA TI
Por su parte, los partners de Samsung en este programa, ONG Innovacien, también se refirieron al nivel o conocimiento que tienen hoy en día los niños, adolescentes y jóvenes sobre tecnología. “Es muy claro que los jóvenes usan la tecnología y tienen buen manejo de ella, pero es innegable que esa facilidad se utilice en elementos más allá de las apps de entretención. Por ejemplo, en PISA 2015 solamente el 0,4% de los escolares chilenos afirmaron que les gustaría trabajar en la industria TI, el promedio de la OECD es 2,6% y de países similares al nuestro como Perú es muy cercano al 4%, casi el mismo de EEUU. Entonces en Chile, necesitamos hacer un proceso de evangelización de las oportunidades futuras en esta industria”.
Esto tiene directa relación con la industria de la tecnología y la posibilidad de en un futuro cercano comenzar a “exportar” mano de obra “especialista”, al respecto, desde ONG Innovacien sostuvieron que, “La industria chilena tiene un gran desafío, nuestras Universidades desarrollan muy buenos profesionales y las empresas tienen capacidad de internacionalización, pero todavía necesita generar una mayor diversidad para que estos procesos de apertura generen impactos mayores a mediano y largo plazo“
Agregando que, “Un punto central es cómo llegamos con formación de calidad en tecnología y temas más básicos para competir internacionalmente (por ejemplo inglés) a los sectores más desaventajados que son los con mayores problemas para insertarse en la industria”.
