Sustentabilidad, eficiencia y alta tecnología aplicada a fibras naturales. Esos son los conceptos básicos que se unen para dar vida a la startup chilena Strong by form, empresa pionera en la elaboración de elementos estructurales en base a madera capaces de reemplazar a otros altamente contaminantes como acero u hormigón. ¿Y cómo? A través de la combinación de ciencia de materiales con las últimas tecnologías de optimización y fabricación digital, son capaces de devolver a los chips de madera la inteligencia de la de origen natural generada por millones de años de evolución. Algo así como una madera digital.
Su primera tecnología, “Woodflow”, no solo genera alta resistencia utilizando un material que captura carbono en su proceso de crecimiento, sino que también permite aprovechar mejor la materia prima al usar hasta el 90% del árbol como elemento estructural, esto en contraposición al 60% al que se llega hoy.
Asimismo, al hacer losas ultraligeras, hacen más liviana toda la estructura, esto implica menos material en muros y cimientos, lo que ayuda permite optimizar el consumo completo de materiales en una construcción.
Otra de las ventajas es que al permitir la prefabricación y utilizar manufactura aditiva, se generan menos residuos. De esta forma, se reemplazan materiales contaminantes por uno sustentable, a la vez que se utilizan muy pocos árboles para hacer un uso extremadamente eficiente del recurso forestal. Esto es más claro aún cuando al compararse con las actuales tecnologías de construcción en madera, Woodlfow consume un 50% de la madera requerida para soportar la misma carga.
El innovador producto, que también tiene alto potencial en el área automotriz, es pionero a nivel mundial y tal como explica Andrés Mitnik, CEO de Strong by Form, “no hay competencia directa ya que nadie hace lo que nosotros hacemos, sin embargo, en Alemania y Suiza hay bastante trabajo en el desarrollo de alternativas sustentables a materiales estructurales. Las soluciones existentes tienden a ser tejidos naturales que soportan un alto volumen de resina (50% o más), nosotros en cambio somos 90% madera, lo que nos hace mucho más sustentables”.
Estas características los llevaron a ser una de las 10 startups seleccionadas para participar del programa de aceleración RESPOND de la Fundación de BMW, el primer programa de aceleración del mundo 100% alineado con los objetivos 2030 de sustentabilidad de las Naciones Unidas, siendo además especialista en modelos de negocios tecnológicos y de impacto. Desde el 2018, es parte del portafolio de la aceleradora Magical quienes los apoyaron en el levantamiento de $1 millón de dólares en su ronda pre semilla.
Robótica de vanguardia
Detrás de la elaboración del material se encuentran innovadores y avanzados sistemas con tecnología de punta. En este sentido Mitnik explica que “el proceso de fabricación robótica ordena las fibras según las instrucciones del algoritmo de optimización estructural. Hoy estamos armando nuestra primera célula que utiliza dos robots, ‘Tina” y “Turner”’.
Asimismo resalta que “la gracia de utilizar robots es que podemos lograr productividad industrial sin necesitar grandes inversiones en infraestructura. Esto implica que podemos montar muchas fábricas pequeñas cerca de los clientes y de alta productividad.
Esto en contraste a la versión de la línea de Henry Ford, que es usada hasta el día de hoy, que consiste en aprovechar economías de escala a partir de la producción centralizada en grandes fábricas Además, dado todas las disrupciones que ha generado el COVID y los quiebres en las cadenas de abastecimiento hoy hay una tendencia a volver producir local y eso hacemos nosotros con nuestros robots”, subraya.
Actualmente están presentes también en Alemania, lugar elegido para el desarrollo de productos, mientras que en Chile se enfocan en el hardware. Y ya se encuentran planificando mover la operación comercial a Europa en menos de dos años.
