Una nueva vulnerabilidad está afectado a prácticamente el 90% de los computadores del mundo. Y si bien ya existe una solución, hay un parche para Windows podría afectar el rendimiento de tu equipo. Revisa a continuación por qué.
Hablamos de Spectre y Meltdown, dos fallas presentes inicialmente en procesadores de Intel y que hoy se han expandido a los fabricados por otras marcas.
Estas vulnerabilidades están presentes en los chips modernos de equipos (tanto computadores como móviles) y permiten el robo de datos como contraseñas, correos electrónicos y ficheros personales y confidenciales.
Tras el descubrimiento de estas fallas, Microsoft anunció una serie de actualizaciones para contenerlas. ¿Cuál es el problema? La empresa ha señalado que esta medida podría afectar el rendimiento de Windows en los equipos afectados, especialmente aquellos anteriores a 2015.
Los equipos más afectados
“Con Windows 10 en procesadores más nuevos (PC de 2016 con Skylake, Kabylake o CPUs más recientes), los puntos de referencia muestran desaceleraciones de un dígito, pero probablemente los usuarios no notarán el cambio porque estos porcentajes se reflejan en milisegundos”, aseguró la empresa por medio de un comunicado.
De esta manera, Microsoft aseguró que los equipos más afectados serían aquellos con los sistemas Windows 10, Windows 8 y Windows 7 en procesadores más antiguos (PC de 2015 con Haswell o CPUs más antiguas).
Según analistas consultados por The Register, el medio que publicó inicialmente la existencia de estas fallas, el impacto en el rendimiento de los equipos estaría entre el 2% y 14%.
Un punto que comparte la empresa de seguridad Red Hat, quienes si bien no da cifras concretas mencionan una disminución importante en el rendimiento de los dispositivos afectados ante esta actualización.
