“Sabores Tradicional y Caseros”: De vender tortas en casa a abrir una pastelería y cafetería

Foto: Facebook @saborestradicionalycasero

Muchas veces una idea de negocio puede partir con algo tan simple como hacer algo en casa y venderlo. Así le sucedió a Marisel Muena microempresaria de Cauquenes, quien pasó de vender tortas a pedido hechas en casa, ahora tiene su propia pastelería y cafetería. Esta es su historia.

“La idea partió por la necesidad de dar un cambio radical a nuestras vidas, empezar en una nueva ciudad y potenciar lo que mi mamá hacía en ese momento. Ella vendía pasteles en su casa”, recuerda Marisel.

Agrega que, “Lo más difícil fue partir. Al principio no contábamos con la maquinaria necesaria para atender la demanda ni el espacio físico donde desarrollar nuestra actividad laboral”.

Hoy Marisel Muena es dueña de “Sabores Tradicional y Caseros”, un emprendimiento familiar de pastelería en Cauquenes, que ha salido adelante mediante la venta a través de redes sociales y pedidos telefónicos.

Capital Semilla y su cafetería

La joven relata que tras acercarse al Centro de Desarrollo de Negocios de Cauquenes, recibió asesoría de expertos, quienes la guiaron y ayudaron para postular al fondo Capital Semilla Emprende de Sercotec.

“El Centro de Desarrollo de Negocios Cauquenes fue fundamental. Lo más importante fue su orientación para ordenar nuestras ideas; creo que sin ellos nada hubiera sido posible. Con su asesoría pudimos postular al Capital Semilla Emprende, lo ganamos y con los recursos entregados compramos maquinaria, nos formalizamos y crecimos el doble en ventas”, recuerda la microempresaria.

Agrega que “ahora estamos abriendo una nueva sucursal en el centro de la ciudad y ampliando nuestro giro a pastelería y cafetería. Soñábamos con estar ubicados en el centro de Cauquenes, y ese sueño se está cumpliendo, estamos pronto a inaugurar nuestro nuevo local”.

Tal como ocurre con Marisel, puedes comenzar con tu emprendimiento desde tu propio hogar, su micropyme comenzó con ventas de alrededor de 200 mil pesos mensuales hasta llegar en tres meses a triplicar esa cifra, creando efectivamente una cartera de clientes gracias a este proceso de aprendizaje llamado “Emprender”.

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